Los mitos y las nuevas verdades sobre vacunas y coronavirus

Dos expertos cuentan cuáles son las recomendaciones que siguen vigentes y cuáles se modificaron. Desde la limpieza de lo que se compra hasta los plazos de vacunación.

G. GARCÍA ADRASTI
Ya no va. Un control en Retiro, del año pasado, donde desinfectaban el calzado de la gente. Es una práctica que se dejó de lado porque el riesgo de contagio es muy bajo.

Los infectólogos Eduardo López y Arnaldo Casiró repasan las recomendaciones que siguen vigentes y las que se modificaron. ¿Hace falta desinfectar todo lo que se trae del súper? ¿Se deben sanitizar frutas y verduras? ¿Hay que sacarse los zapatos y echarle alcohol a la ropa al regresar de la calle? ¿Conviene usar guantes? ¿Es riesgoso pedir comida por delivery? Ibuprofeno, ¿sí o no? ¿Es bueno tomar multivitamínicos para reforzar las defensas? ¿Se pueden mezclar las vacunas? ¿Es necesario esperar quince días entre la antigripal y la del Covid? ¿Cuándo hay que medicarse?.


El mundo se vio obligado a reaccionar ante el Covid-19, un virus nuevo, de familia conocida (un SARS) aunque con características diferentes y un alcance solo visto en películas apocalípticas. Aprendimos sobre la marcha y muchos de los grandes sí o no del inicio se fueron modificando.


Al principio se decía que el tapabocas no servía. Al tiempo se volvió obligatorio. Durante los primeros meses de la pandemia también había que cambiarse la ropa al llegar a la casa o rociarla con alcohol. Se creía que esa era una de las vías más importantes de contagio. Luego, el foco de atención pasó a los aerosoles que se desprenden al hablar o estornudar.


Un año y medio después, los infectólogos Eduardo López, jefe del departamento de Medicina del Hospital Gutiérrez, y Arnaldo Casiró, a cargo del área de Infectología del Hospital Álvarez, repasan con Clarín lo que se recomendó hasta hoy y cuánto de ello sigue vigente.


Usar tapabocas... ¿y guantes?


No siempre se reconoció la utilidad del tapabocas. La Organización Mundial de la Salud (OMS) fue cambiando sus recomendaciones y al comienzo de la pandemia dijo que solo era necesario entre las personas que presentaban síntomas.


China y Corea fueron los primeros países en los que se implementó. “Hoy se sabe que es una medida de prevención fundamental junto con el distanciamiento”, resalta López.


Durante los primeros meses de la pandemia también nos encontramos con gente que salía a la calle con guantes. Rápidamente los infectólogos desaconsejaron su uso por la falsa sensación de seguridad que podían generar. “Había personas que se tocaban la cara con los guantes usados y, en consecuencia, contaminados”, advierte Casiró.


Limpiar las compras del súper


La forma más frecuente de transmisión es a través de los aerosoles, “que son partículas de menos de 5 milimicrones que quedan suspendidas en el aire por minutos o hasta horas”, explica López.


Los especialistas sostienen que la posibilidad de contraer Covid por contacto con una superficie es mucho menor y que todo indica que el virus sobrevive pocos minutos sobre cartones, latas o paquetes de plástico. Sin embargo, Casiró aclara que “faltan estudios como para desalentar la limpieza de estos productos”.


Sanitizar frutas y verduras


Comer frutas o verduras con partículas infectantes no es un mecanismo habitual de contagio. Igualmente, dejar remojar los vegetales por 20 minutos en agua con unas gotitas de lavandina es una buena práctica para eliminar virus y bacterias. Es decir, es una rutina que se puede sostener.


Pedir comida afuera


En el arranque de la pandemia, para muchos no era una opción. El boom de recetas para preparar en casa tuvo un poco que ver con ocupar el tiempo “libre” en el hogar, pero también con el miedo inicial a pedir delivery o comer afuera.


“Con la cocción se inactiva el virus. Faltan investigaciones sobre los alimentos crudos y fríos, aunque sí sabemos que su ingesta no está entre las principales vías de transmisión del virus”, comenta Casiró.


Sacarse la ropa y los zapatos al regresar de la calle

No hace falta cambiarse la ropa o los zapatos al volver a casa ni rociarlos con alcohol.

Contagiarse por lo que llevamos puesto puede llegar a ser la excepción, no la regla. Al principio de la pandemia se pensaba lo contrario. Hoy se considera esta medida como poco relevante. Los expertos dicen que no hay que rociar la ropa con alcohol ni cambiarse al ingresar a una casa, salvo que la persona haya estado en un lugar de mucha exposición, como un hospital.


Consumir multivitamínicos


Tener las defensas altas fue otro de los puntos sobre los que se insistió. En este contexto es que muchas personas recurrieron a los multivitamínicos. Los infectólogos explican que no todas las vitaminas impactan sobre las defensas y que incluso la vitamina C, que colabora en la prevención de un resfrío, no va a evitar el contagio del coronavirus.


Evitar cualquier tipo de medicamento para no tapar síntomas


La automedicación siempre estuvo contraindicada, incluso antes del Covid. Sin embargo, en pandemia todo se llevó al extremo. Sigue siendo clave no tapar síntomas aunque hoy se sabe que la fiebre por Covid no desaparece por tomar un único paracetamol. Hay que estar atento a posibles síntomas y no subestimar dolores pero se puede tomar un analgésico frente a un malestar asociado, por ejemplo, a un dolor menstrual.


Ibuprofeno, ¿sí o no?


La premisa en el comienzo de la pandemia era “paracetamol sí e ibuprofeno no”. La explicación, según los infectólogos, tenía que ver con “posibles efectos adversos, como gastritis o sangrado”, destaca López.


Actualmente, esta sugerencia cambió e incluso se publicó en mayo un estudio en la revista The Lancet en el que señalan que el Ibuprofeno no presenta contraindicaciones.


Terapias preventivas y tratamientos 

La hidroxicloroquina es otra droga sobre la que la comunidad médica prestó especial atención y que, en un comienzo, trajo esperanzas. Aunque luego se comprobó que no era eficiente contra el coronavirus.


Otra terapia fue el suero de convalecientes. Sin embargo, se supo que “solo resulta efectivo en cuadros leves y siempre que se administre en los primeros tres días”, aclara López.


Intervalos y combinación de las vacunas


Argentina mantiene la indicación de sostener un intervalo de dos semanas entre cualquiera de las dosis de las vacunas y la de la gripe. Sin embargo, la situación es diferente en otros países. “En Australia, por ejemplo, el plazo es de 7 días y en Estados Unidos se aplican en forma simultánea por lo que es posible que en el futuro la recomendación local se modifique”, comenta López.


Hasta hace poco, se pensaba que las vacunas de diferentes laboratorios no se podían combinar. Hoy se observa esta posibilidad como una estrategia prometedora. Incluso ya se está implementando en algunos lugares del mundo con AstraZeneca, Pfizer y Moderna. “Inglaterra, Canadá y Chile son algunos ejemplos”.

Comentarios

Entradas más populares de este blog

Los casos de dengue en la costa del río Uruguay quintuplican a los de COVID-19 de toda la provincia

Antes de morir tras un accidente en una ruta de Entre Ríos había reclamado por el estado del camino

REFLEXIONES SOBRE EL DEBATE PRESIDENCIAL DE CARA AL BALOTAJE