El golpeado bolsillo de la clase media
La presión sobre el bolsillo de la clase media sigue creciendo. Se calcula que en mayo una familia en la Ciudad y el Gran Buenos Aires gastará $118.825 para pagar luz, gas, agua y transporte, un 15,6% más que el mes anterior. Es la contracara de la “motosierra”, ya que en el primer cuatrimestre se redujeron un 40,8% los subsidios para el transporte y los servicios públicos. El ajuste tiene consecuencias en otras áreas muy frágiles, entre ellas, el empleo de personal doméstico. En un rubro muy poco formalizado (71% "en negro"), la cantidad de trabajadoras que estaban en blanco vienen cayendo. Si comparamos el último dato de febrero con el mismo mes del año pasado, la baja es de casi 5%; y se descuenta que la reducción de las no registradas es todavía más alta. Hoy, en promedio, las familias cubren el 37% de las tarifas y el Estado se hace cargo del 63%. Y, por ahora, en el marco de la recesión, el ministro de Economía Luis Caputo puso un freno y tiene "pisadas" las t